Una visita guiada por el Teatro Cuyás donde el alumnado, a partir de 8 años, recorre este espacio arquitectónico de la mano de Max Estrella, un excéntrico personaje salido de una obra de Valle-Inclán, para descubrir un lugar de creación, exhibición, convivencia y cultura.
Visitas guiadas. El teatro por dentro es un recorrido por el Teatro Cuyás en el que, partiendo del libro El teatro por dentro, se invita al alumnado de Primaria, ESO y Bachillerato a adentrarse en la historia del arte escénico a través de una aventura mágica donde la acción se vuelve espectáculo y las artes cobran vida.
La actividad parte de la premisa de que el teatro es un lugar de encuentro donde se dan cita las personas que actúan y las que disfrutan de la representación en directo. Además, es un espacio donde se reúnen todas las disciplinas para dar vida a una historia: literatura, filosofía, artes plásticas, música y, por supuesto, interpretación. Y, por supuesto, como lugar de trabajo, da cabida a profesionales que, desde áreas como la producción, la escritura, el diseño o la actuación, conforman la compañía teatral. Pero no solo esto, el teatro se nutre de un trabajo colaborativo donde está presente el juego. Por este motivo, se propone al alumnado un divertimento sencillo que reúna todas estas características: convertirse, por un instante, en compañía teatral y jugar a improvisar.
Así, al llegar al teatro, los alumnos y alumnas son recibidos por Max Estrella, un personaje muy especial proveniente de una obra de Valle-Inclán que les propone dar un paseo por el teatro a la vez que se convierten en una compañía teatral que va a estrenar su obra. Primero, la visita comienza por aquellos lugares donde los espectadores nunca suelen adentrarse: los camerinos, donde conocen a Musa, la luna del Cuyás; y, a partir de ahí, recorren espacios como el escenario, el patio de butacas o el vestíbulo mientras Max les cuenta curiosidades, anécdotas y datos que dan forma a un recorrido de más de 2000 años de antigüedad.
De esta manera, con esta visita, el alumnado descubre un lugar que a veces le resulta ajeno; rompiendo, con ello, barreras psicológicas y descubriendo un espacio público cultural concebido para dar cabida a toda la ciudadanía. Además, los alumnos y alumnas conocen mediante el aprendizaje directo y experiencial todas las posibilidades que ofrece el teatro, tanto como espectadores como potenciales profesionales del mismo, como lugar donde se dan cita el entretenimiento, la reflexión y el desarrollo personal y comunitario.